domingo, 3 de mayo de 2009

LADYBIRD, LADYBIRD

Hay cintas que llegan a tocar la fibra sensible cuando unomenos se lo espera. Y de vez en cuando recordarse a uno mismo el motivo por el cuál al cine europeo se le tilda de costumbrista puede llenar de orgullo por saberse dueño de un pequeño tesoro.

Empiezo a ver la cinta movida por la curiosidad. Y es que en más de una ocasión he escuchado de sus labios el "Ladybird, Ladybird" sin saber de dónde venía el nombre. La mujer pájaro.

Pero nada apunta a la crudeza de una historia tan real como desgarradora. La de una mujer castigada por su propia experiencia, que parece buscar en los hombres el reflejo de un padre al que apenas conoció. Si de víctimas renacen víctimas, parece que el propio retrato busca confirmar la realidad que ella misma vivió. Víctima de abusos, parece no creer merecer nada más de aquellos de los que se rodea. Ama al que le desprecia, y engendra de él.

Con 4 hijos a su cargo, un marido que llena su rostro y cuerpo de cardenales por cualquier nimiedad, busca alejarse sin confiar en los servicios sociales. Los que no han sabido solucionar sus problemas en ninguna ocasión. No obstante, será una noche cualquiera cuando un incendio le arrebatará a sus hijos, alejándolos de su cuidado por su carácter agresivo y rebelde. Una madre que les deja en mitad de la noche, piel quemada, y el resentimiento que crece.

Desconfianza e ira no albergan más espacio en su corazón. Ni siquiera cuando amar sin condiciones puede ser una opción en su día a día. Sin embargo, parece que rehacer una vida diezmada por los abusos no tiene lugar en una sociedad que juzga sin querer entender. Que no abre las puertas a que uno disponga de los medios suficientes para que crezcan flores donde sólo hubo odio. Dos hijas de esta nueva vida arrebatadas, y la lucha que continúa para demostrarse a sí misma (y al mundo) que a veces es necesario que una mano nos guíe en el camino que somos incapaces de ver por nosotros mismos.

DIRECTOR: Ken Loach
AÑO: 1994

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